La limpieza
Los radiadores también precisan de mantenimiento anual. La clásica purga de radiadores es una tarea en principio sencilla; pero como cada fabricante y modelo tiene sus propias características, Riesma te ofrece este servicio para la perfecta puesta a punto de tus radiadores.
Además es necesaria una limpieza periódica de la caldera (sobre todo si están instaladas en terrazas ó patios) ya que, a la larga, la suciedad puede repercutir en su funcionamiento.
En este caso recurre siempre a un paño húmedo y evita el uso de productos de limpieza abrasivos. Recuerda que es imprescindible que cortes el suministro eléctrico, así como el paso del gas o combustible por el dispositivo mientras estés limpiándolo.
Otros elementos que hay que limpiar de forma habitual son los tubos de evacuación y las rejillas de salida, para evitar obstrucciones provocadas por la acumulación de suciedad.